11 noviembre 2014

Para ella y para él

Del mismo barro en los pies,
del mismo desayuno apurado,
de la misma lección de historia,
de la misma lluvia tropical,
del mismo abrazo infinito,
desgarrador,
sobrehumano...

Nació este amor in-medible,
incomparable,
egoísta,
narciso,
absoluto.

Resumido en una palabra...
Tan pequeña,
tan vulgar,
tan cotidiana:

hermano,
hermana.